Washington, DC – A continuación compartimos un comunicado de Frank Sharry, Director Ejecutivo de America’s Voice, una organización de defensa de los inmigrantes.
“America’s Voice apoya fuertemente la Ley Para una Mejor Mejor Reconstrucción (BBB) e insta a los miembros de la Cámara de Representantes a votar ‘sí’ en este proyecto.
Nos complace que el plan incluya disposiciones que ofrecen permisos de trabajo y protección contra la deportación durante un periodo de 10 años para unos 7.1 millones de inmigrantes indocumentados. Las personas elegibles han permanecido en Estados Unidos durante al menos 10 años y, en promedio, quienes califican han vivido y trabajado en el país durante veinte años.
El Comité Judicial de la Cámara de Representantes calcula que dichas cláusulas protegerán a 1.6 millones de jóvenes inmigrantes, 360,000 beneficiarios de TPS, así como a 3.6 millones de trabajadores esenciales, que incluyen a 1 millón de trabajadores agrícolas. Además, se calcula que 17 millones de personas —1 de cada 20 residentes estadounidenses— viven en una casa que incluye al menos a una persona que se beneficiará del estatus legal que dispone el proyecto de ley.
Hemos estado peleando, y seguiremos haciéndolo, por una vía a la ciudadanía para los 11 millones de inmigrantes indocumentados en Estados Unidos. Este proyecto de ley se queda corto en ese propósito, pero apoyamos su promulgación porque es una dramática mejoría sobre la situación actual. En estos momentos, millones viven con el miedo diario a ser deportados; trabajadores son explotados por empleadores inescrupulosos que se aprovechan de su estatus migratorio; y a las familias se les niega la oportunidad de viajar al extranjero para visitar a sus seres queridos. Las cláusulas migratorias contenidas en el proyecto de ley BBB proveen permisos de trabajo, protección de la deportación y autorización para viajar.
Los inmigrantes indocumentados han arriesgado sus vidas para mantener a los estadounidenses alimentados, seguros y saludables durante la crisis de salud pública más seria en un siglo. Los inmigrantes indocumentados son estadounidenses en todo el sentido de la palabra, excepto por los documentos que lo comprueben, y solamente el Congreso puede reconocer esa verdad formal y legalmente.
Demos un paso adelante ahora y no nos detengamos hasta llegar a la cima de la montaña”.