Con una veintena de eventos a través de la nación y a seis meses de las elecciones generales, los Soñadores o DREAMers volvieron a la carga en sus esfuerzos de obtener un alivio administrativo de parte del presidente Barack Obama que los proteja de la deportación, como grupo, en tanto progresa el esquivo proyecto de ley DREAM Act que los legalizaría.
La campaña “El derecho a Soñar” se produce mientras el senador republicano de Florida, Marco Rubio, asegura que se apresta a presentar su versión del DREAM Act, una medida que no contemplaría un mecanismo de ciudadanía directo, pero que según el senador permitiría que los jóvenes se regularicen a través de las vías tradicionales. Se desconoce si la medida de Rubio tendrá el apoyo de sus colegas republicanos en el Congreso que hasta el momento han bloqueado los previos esfuerzos legislativos de avanzar el DREAM Act, el más reciente el diciembre de 2010.
Pero con la elección en puerta, la batalla por el voto latino en curso, y la posibilidad de un republicano presente un proyecto de ley sobre el DREAM Act, medida que tiene el apoyo de nueve de cada diez latinos, aumenta la presión para que el presidente Obama eche mano de su autoridad ejecutiva y gire una orden ejecutiva que proteja a los Soñadores de la deportación.
La Casa Blanca ha indicado previamente que el presidente no girará la orden porque le corresponde al Congreso legislar en torno al asunto.
El año pasado, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) anunció su política de discreción ejecutiva para priorizar las deportaciones y centrarse en verdaderos criminales y no en jefes de familia o estudiantes. Poner en práctica la teoría ha sido más complicado.
“La detención de Soñadores continúa”, afirmó Gaby Pacheco, coordinadora de United We Dream.
La semana pasada en el programa Al Punto de la cadena Univisión, el líder de la mayoría demócrata del Senado, Harry Reid, declaró que el presidente haría más administrativamente en torno a los Soñadores y que ello ocurriría pronto.
Un total de 22 senadores demócratas firmaron una carta enviada al presidente Obama solicitándole que considere la acción diferida o suspensión de deportación para todos los jóvenes indocumentados que serían elegibles para el DREAM Act si el proyecto se promulgara.
Rubio es considerado como un potencial compañero de fórmula del virtual aspirante presidencial republicano, Mitt Romney, quien durante las primarias afirmó que de ser electo presidente vetaría el proyecto DREAM Act en su versión actual si llegara a sus manos.
Pacheco declaró que United We Dream apoya el hecho de que Rubio haya puesto el tema sobre el tapete, pero que no pueden indicar si apoyan o no la propuesta “porque no hemos visto el lenguaje”.
La joven activista afirmó que ambos partidos han utilizado a los inmigrantes como balón político y de campaña.
Pacheco también indicó que el tema migratorio ha colocado a los votantes latinos en una disyuntiva. De un lado la falta de acción en el DREAM Act sumada a la cifra récord de deportaciones bajo la administración Obama y que la promesa de reforma migratoria no se haya concretado, y del otro un Partido Republicano con un virtual candidato presidencial que sólo ha esbozado retórica antiinmigrante.
Según Pacheco, esto no ofrece a los votantes latinos una vía clara sobre a quién apoyar.
Las encuestas recientes evidencian el apoyo de los votantes latinos a Obama sobre Romney. La interrogante es si los latinos saldrán a votar en cifras suficientes en estados clave garantizando así la reelección del presidente.
El mensaje de Pacheco y de los Soñadores a Obama fue claro y contundente: “Nueve de cada diez latinos apoyan el DREAM Act. Necesitamos que transforme su apoyo de palabras en acción. El tiene la habilidad de firmar una orden ejecutiva y le estamos pidiendo que lo haga ahora porque no podemos perder un estudiante más en nuestra comunidad”.