Cerrar el gobierno si no le dan fondos para el muro fronterizo es tan innecesario y ofensivo como la propuesta misma del muro
Washington, DC – Tras destrozar un proyecto de ley de gastos bipartidista que habría podido financiar al gobierno, Trump y el Partido Republicano nos están llevando al cierre del mismo. A continuación compartimos un comunicado de Frank Sharry, Director Ejecutivo de America’s Voice, al respecto:
Trump es terrible para el trabajo que fue elegido. En lugar de crecer como Presidente, lo que ha hecho es disminuir la presidencia. Mientras tanto, el cobarde Partido Republicano se lo permite y lo consiente, a expensas del futuro estadounidense.
A él realmente no le importa la política pública, lo único que le interesa es el manejo de su imagen. Lleva a cabo todo como si se tratara de un reality show y su única preocupación es cómo sale de episodio tras episodio. Esa es la razón por la que reaccionó a las críticas de Ann Coulter y Rush Limbaugh destrozando una estrategia bipartidista con la que había estado de acuerdo, a fin de forzar un cierre del gobierno. Fue acusado de ser débil, de tal modo que decidió aparecer como actuando con dureza.
Al final, su política de apariencia no resultará más que en la afectación de los empleados federales, en la ira de los ciudadanos y en una derrota ignominiosa.
Han pasado apenas unas semanas de las elecciones de medio periodo en las que los votantes propinaron a Trump y a su racismo y xenofobia un revés contundente. En un momento de más normalidad, las sanas mentes políticas del Partido Republicano verían cómo ese divisionismo y fanatismo serían contraproducentes, y que en la contienda hacia el 2020 se requiere una estrategia de inclusión. Pero ese partido permanece cautivo por parte de Trump, y él a su vez es cautivo de los extremistas etno-nacionalistas a los que él mismo da poder. Ambas partes tienen un solo truco: alimentar el miedo a los otros, mientras llenan los bolsillos de los ricos y nos los quitan a los demás.
Por supuesto, dado que todo se trata de él y del show, Trump el fabulador asegura que ganó la elección. Y cuando termine el cierre del gobierno, una vez más volverá a asegurar que ganó. Hará una afirmación mentirosa de que obtuvo lo que quería y hablará sin cesar sobre las ‘artísticamente diseñadas tiras de acero’.
Pero los demás lo sabemos: Trump es terrible para el trabajo que fue elegido. En lugar de crecer como Presidente, lo que ha hecho es disminuir la presidencia. Mientras tanto, el cobarde Partido Republicano se lo permite y lo consiente, a expensas del futuro estadounidense.