Hoy, dos hermanos de Boston que atacaron salvajemente a un inmigrante mexicano protagonizando un delito de odio inspirados en Donald Trump fueron sentenciados a prisión. El siguiente es un texto en blog sobre el incidente escrito por Gabe Ortiz, de America’s Voice (lea la version en inglés aquí).
Dos autoproclamados seguidores de Donald Trump han sido sentenciados a prisión después de ser declarados culpables de atacar a un indigente latino en agosto pasado porque pensaron que se trataba de un inmigrante indocumentado.
Los hermanos Scott y Steven Leader “fueron declarados culpables de diversos delitos, incluyendo ataque, agresión, intimidación y violaciones de derechos civiles”, de acuerdo con el Boston Globe.
“Scott Leader, quien según los fiscales tiene antecedentes de delitos de odio en contra de minorías, fue sentenciado a tres años en una prisión estatal. Steven Leader fue sentenciado a al menos dos años tras las rejas”.
En el que se considera uno de los ataques más salvajes inspirados en la retórica de Trump, los intoxicados hombres aterrorizaron a Guillermo Rodríguez mientras dormía, con un tubo de metal, rompiéndole la nariz y dejándole con serias heridas en sus costillas. Ambos concluyeron su despiadado ataque con un acto de humillación orinando en su cara.
La Policía que se presentó al lugar del ataque informó que encontró a Rodríguez “tirado en el piso, temblando, y su cara… empapada”. Los hermanos, dicen los testigos, fueron vistos “retirarse de ahí burlándose”. Cuando fueron arrestados y cuestionados, los hermanos le dijeron a la policía que “Donald Trump estaba en lo correcto, que todos esos ilegales tenían que ser deportados”.
Rodríguez, un inmigrante originario de México, es residente permanente de Estados Unidos.
“No puedo entender por qué me hicieron esto”, dijo Rodríguez en una declaración al Boston Globe. “Yo no les hice nada y ni siquiera los conozco. He escuchado que hicieron esto debido a la retórica política”.
“Vine a este país hace muchos años y trabajé en los campos agrícolas para proveer de alimentos a la gente de aquí”, añadió. “De hecho me hice residente permanente de este país hace unos años, y aun cuando hubiera sido indocumentado, no habría merecido que me golpearan de ese modo”.
Informes indican que Scott Leader ya tenía antecedentes de delitos de intolerancia racial, al reñir con un hombre del Medio Oriente tras los ataques del 9/11, y luego acosar a un grupo de asiáticos en 2005.
Cuando se le informó inicialmente del ataque contra Rodríguez, Trump intentó distanciarse del incidente, pero no sin antes decir a los reporteros de forma vil que sus seguidores son simplemente “apasionados”.
Desde entonces, los ataques contra la gente de color a manos de sus seguidores se han incrementado, con el mismo Trump instando a la violencia al decir que un manifestante de Black Lives Matter que irrumpió en su acto de campaña “deberían haberlo molido a palos”.
Nosotros hemos seguido documentado la violencia y los ataques verbales inspirados en Trump, con incidentes ahora registrados en 20 estados en un “Mapa del Odio de Trump” aquí.