Si el Congreso aprueba la reforma migratoria y el presidente Barack Obama la promulga, cientos de miles, quizás millones de indocumentados serían arrestados y deportados porque no tienen cómo demostrar que tienen identidad. Se estima que 30 por ciento de los mexicanos indocumentados en este país no tienen un acta de nacimiento, y sin ella no pueden tramitar ningún documento de identidad, algo que les sería indispensable si se llega aprobar la reforma migratoria, señalan autoridades consulares mexicanas. Debido a que estos documentos no se expiden en los consulados mexicanos, muchos inmigrantes contratan abogados o agencias que ofrecen el servicio. Pero la mayoría de las veces, dice Reyes, directora de este registro civil, les consiguen actas falsas y cobran cantidades estratosféricas.