Reacción de Maribel Hastings, asesora ejecutiva y columnista de America’s Voice, a la deportación de adolescentes centroamericanos y a las declaraciones de la administración Obama de que se están conduciendo de forma “humana”:
“Esta administración y su Departamento de Seguridad Nacional (DHS) pueden escudarse tras los argumentos que quieran, pero la realidad sobre el terreno cuenta otra historia. Deportar a niños, jóvenes y madres a países plagados de pandillas y violencia, y en ciertos casos quizá a una muerte segura, no es en modo alguno una forma “humana” de abordar este asunto. Hoy mismo los medios informan de la detención de un joven hondureño por agentes de ICE en Carolina del Norte mientras se dirigía a la escuela secundaria. En lugar de poder completar sus estudios lo envían a ser presa fácil de reclutadores de pandillas y narcotraficantes o a su potencial muerte. No hay nada “humano” en una política que divide familias y que en muchos casos no ofrece a estas personas la oportunidad de contar con la representación legal adecuada para probar sus peticiones de asilo. El hecho de que el DHS concluya que son personas de reciente ingreso y que no pudieron probar sus peticiones de asilo, no significa que sus casos no tengan validez pues en muchas instancias no han contado con los recursos o la debida asistencia legal. Resulta vergonzoso que esta administración demócrata siga defendiendo una política migratoria errada hacia los centroamericanos, que use eufemismos para minimizar el terror que estas deportaciones están generando entre la comunidad inmigrante, y que el presidente y sus asesores sigan restando puntos a su ya maltrecho legado en materia migratoria con casi 2 millones de deportaciones sobre sus espaldas”.