Activistas sindicalistas y de base mantienen su rechazo a los intentos del GOP de vilipendiar a la comunidad indocumentada y manipular temores económicos y sociales para sus fines electorales.
Líderes de todo el Estado de la Florida rechazaron con firmeza el último intento de Donald Trump para vilipendiar a la comunidad indocumentada y enfrentar a los trabajadores nacidos en Estados Unidos en contra de los inmigrantes.
Mientras muchos pensaban que Trump trataría de usar su discurso de anoche en Phoenix para suavizar su retórica xenofóbica, rápidamente se hizo evidente que en vez de eso Trump estaba usando su momento para consolidar una base republicana que viene siendo progresivamente alimentada por la ultraderecha y los grupos extremistas. Culpando a los inmigrantes por todo, desde el estancamiento económico hasta la violencia desenfrenada, Trump presentó 10 redundantes puntos de su propuesta política migratoria que incluían la deportación de los actuales inmigrantes indocumentados, la imposición de penas mínimas obligatorias aquellos que se queden más allá de lo que permiten sus visas, el bloqueo de la financiación de las ciudades pro-inmigrantes, y la detención de cualquier inmigrante indocumentado acusado de un delito.
Usando medias-verdades y mentiras ya desacreditadas por los expertos, Trump volvió a recordar a los votantes lo que realmente está en juego en esta elección. Enunció una propuesta política que puede haber revitalizado a la base que le entregó la nominación republicana, pero que al mismo tiempo no es ni presidencial ni respetuosa de las diversas comunidades que integran y empoderan la democracia estadounidense.
“Las familias trabajadoras en Florida no se dejarán engañar por la desesperada redoblada de políticas peligrosas y retóricas de odio de un candidato presidencial que se da cuenta que está perdiendo. Donald Trump sigue siendo la opción menos fiable y más divisiva para la Presidencia,” dijo Mike Williams, presidente de AFL-CIO Florida. “Son las malas políticas inmigratorias, no la inmigración en sí, quienes perjudican a los trabajadores estadounidenses. Todos los trabajadores se benefician de un sistema integral de inmigración con un camino a la ciudadanía. El enfoque policial de Trump ha demostrado ser ineficaz, caro y desastroso tanto para los contribuyentes como para los derechos de los trabajadores. En vez de construir muros deberíamos construir puentes de prosperidad compartida hacia las comunidades de trabajadores inmigrantes.”
“No importa qué cara Donald Trump muestre, los hombres y las mujeres que se despiertan todos los días para mantener nuestras ciudades, condados y estados funcionando no olvidarán su histórico de vilificaciones, amenazas, insultos, y discriminaciones hacia nuestros colegas de trabajo, vecinos y amigos”,dijo Andy Madtes, Director Ejecutivo de AFSCME Florida. “Su visión xenofóbica para América arruinaría nuestra economía y nuestro país para las generaciones venideras.”
“En vez de vilipendiar inmigrantes, Trump debería empezar a oír a las familias trabajadoras de la Florida, a nuestros hijos, a nuestros votantes”, dijo Monica Russo, presidente de SEIU Florida y vicepresidente ejecutiva de 1199 SEIU United Healthcare Workers East in Florida. “Desde 2013, los votantes han dicho en encuesta tras encuesta que apoyan la reforma migratoria con camino a la ciudadanía. Si aún hay lugar a duda, encuestas recientes confirman que 62% de los residentes de la Florida no han cambiado su opinión.”
“El Donald Trump que escuchamos anoche es el mismo racista que ha constantemente dicho que quiere criminalizar inmigrantes, acabar con DACA para los Dreamers, y limitar quién tiene acceso al sueño americano”, dijo María Rodríguez de FLIC Votes. “El único plan que él y sus apologistas del GOP ofrecen es uno que irrumpe la fábrica social y económica de cientos de miles de comunidades, todo en un esquema alimentado por odio que dejará a esta nación tan ‘grande’ como todos los negocios fracasados de Trump.”
“Donald Trump no entiende que las preocupaciones de la mayoría de los estadounidenses van más allá de un grupo racial o étnico. Los puertorriqueños podemos ser ciudadanos americanos, pero entendemos el pedido de nuestros hermanos y hermanas inmigrantes”, dijo Frederick Velez III de Organize Now. “No sólo porque nosotros sabemos muy bien qué se siente ser tratados como “el otro” o en algún punto haber sido atacados por nuestro idioma, cultura y costumbres. Vivimos en familias y comunidades mixtas donde todo desde nuestros corazones hasta nuestro futuro económico están entrelazados con aquellos que están tratando de normalizar su estatus. Si Trump entendiera y respetara eso, entendería que la manera de solucionar nuestro sistema inmigratorio es con un enfoque comprensivo construído en base a las fortalezas de nuestro país en vez de enfrentar a estadounidenses unos contra los otros’’.
“Donald Trump demostró una vez más que él no está en condiciones de liderar este país”, dijo Marcia Olivo del Miami Workers Center. “Los inmigrantes indocumentados y sus hijos, muchos de los cuales son ciudadanos americanos, trabajan duro, pagan impuestos y contribuyen en otras formas de valor incalculable. Ellos no son los responsables por la reducción de los salarios, el aumento de los costos de vivienda, los servicios de guardería inasequibles, las escuelas deficientes y otros desafíos que preocupa a todos los americanos. Echarles la culpa de estos problemas y empoderar a nacionalistas blancos racistas puede ser clásico de Trump, pero ciertamente no es una receta para el liderazgo que necesitamos. ”
“Después de ayer, no debería haber ninguna duda de que cualquier referencia a una posible política migratoria ‘moderada’ o ‘compasiva’ por parte de Trump es insincera,” dijo activista Ana Lamb desde Tampa. “En este sentido, nada ha cambiado- Trump y sus acólitos aún tienen toda la intención de separar familias y dejar a 11 millones sin un camino a la igualdad.”
“Esto no hace más que asustar a los votantes y aumentar los beneficios para las empresas privadas de prisiones”, dijo Gihan Perera de New Florida Majority. “Es la misma política del miedo que ha hecho muy poco para la economía, ha desgarrado familias y ha restringido los futuros de una generación de jóvenes afroamericanos y latinos.”
“La descarada misoginia de Trump y su menosprecio por las mujeres es anticuado e ignorante,” dijo Esther Pereira, líder pro-inmigrante y organizadora de la comunidad de Broward. “Su discurso de esta noche muestra precisamente cómo quiere dividirnos e incitar a los estadounidenses a luchar los unos contra los otros. Así que dime, ¿cómo sería este país con una persona así encabezándolo?”
“Donald Trump no cambiará su posicionamiento migratorio y esto tendrá consecuencias en las urnas. Nuestra comunidad no olvidará cómo utilizo y abusó de nuestro trabajo, irrespetó a nuestras familias y creó un ambiente de racismo y odio sin precedentes”, dijo María Bilbao de United Families. “La parte más triste es que incluso después de anoche, seguiremos viendo a nuestros líderes hispanos vendiendo a nuestra comunidad a cambio de salarios gordos y tratando de confundir a los hispanos para que voten por Trump.”
“Está claro que después de anoche no importa cuánto los acólitos de Trump como Helen Aguirre, Modesto Maidique, o el Representante Carlos Trujillo intentan mostrarlo como compasivo y moderado, su política migratoria es todo menos eso. Trump continúa liderando una campaña de xenofobia y odio que se refiere a mexicanos y otros inmigrantes como asesinos, violadores y ladrones”, dijo el activista y escritor Thomás Kennedy desde Miami. “Anoche fue otro ejemplo de por qué jamás podemos confiar en que Trump tenga el interés de nuestra comunidad en mente.”
“Donald Trump ha anunciado una vez por todas cuál es su posición con respecto a los inmigrantes indocumentados y a las comunidades que los apoyan”, dijo Elbert García, Director estatal de Florida’s Voice. “Con las elecciones primarias pasadas, es tiempo de que los candidatos decidan: ¿Lucharán a favor de la visión limitada de los Estados Unidos que promueve Trump y su vilificación de los inmigrantes? ¿O lucharán por la promesa de América donde el éxito no está determinado por qué hacían o de dónde vinieron nuestros antepasados, sino por cuán duro estamos dispuestos a trabajar por y con nuestros vecinos?”