Por Maribel Hastings y David Torres:
Mientras el convivio demócrata domina la atención mediática a lo largo de esta semana, para los inmigrantes mexicanos, para los puertorriqueños y para otros hispanos que habitan en esta ciudad, la vida sigue igual. Unos quizá más esperanzados que otros ante la posibilidad de que Hillary Rodham Clinton gane la contienda presidencial ante el candidato republicano, Donald Trump.
En el sur de la ciudad, en un mercado que solía ser mayormente italiano, ahora predominan los puestos, restaurantes y otros negocios de mexicanos, la mayor parte de Puebla.
En este sector, la preocupación central sigue siendo la esquiva reforma migratoria. El presidente Barack Obama no pudo cumplir la promesa, y ahora Clinton la retoma. Ha prometido presentar un plan de reforma migratoria en los primeros 100 días de su gestión, si resulta electa.
La nueva promesa no genera mucho entusiasmo, pero tener a Trump y su plan de deportaciones masivas como alternativa, hace que muchos se aferren a la idea de que con Clinton cuando menos hay una posibilidad, siempre y cuando, claro está, se den las condiciones en el Congreso, al menos cuando de una reforma migratoria por la vía legislativa se trata.
“Para serte sincera no es tanto la confianza… o sea, entre las diferentes propuestas, contrastando con las del otro candidato, pues tenemos más posibilidades con Hillary que con Trump”, dijo una joven dependiente de una tienda de envío de remesas, oriunda de Puebla.
“Yo fui una de las beneficiadas con DACA, pero sí la necesitan (la reforma migratoria) mis papás, mis amigos…”, agregó.
En un mercado cercano, la cajera, también de Puebla, indocumentada con dos hijos ciudadanos estadounidenses de 6 y de 3 años de edad, ya no guarda muchas esperanzas.
“No creo que se vaya a dar una reforma migratoria. Después de todo lo que está pasando, ya no es confiable, no se va a hacer”, afirmó.
“Hay muchas cosas que se dicen y pues ya no confío en nada, pero preferimos que esté Hillary en lugar de Donald Trump”, declaró.
“Si ganara Trump es como decir, vete. Todos comentamos eso (con los clientes), que si entra Trump nos va a sacar”, dijo.
“Pero muchos sí están a favor (de Trump), me doy cuenta… Hace unos días vino un proveedor y me dijo ‘yo estoy con él (con Trump) porque quiere sacar a todos los criminales’. Está bien que limpie el país porque quién quiere a la gente de ese tipo aquí, pero lo que dice y habla de nosotros… dice cosas muy feas”, indicó la joven madre.
Como en otras ciudades con fuerte presencia de indocumentados, la desconfianza se mezcla con la desesperanza. Muchos ni quieren hablar del tema.
Al norte de la ciudad, fuerte enclave de puertorriqueños, el lamento borincano es de otro tipo.
Muchos puertorriqueños batallan con problemas económicos y sociales y acá también se siente la crisis que afecta a la Isla.
Sin embargo, don Carlos Colón, oriundo de Humacao, Puerto Rico, con 35 años viviendo en Filadelfia, celebra la presencia de los demócratas en esta ciudad.
“Es maravilloso (que estén los demócratas en Philly), porque yo soy demócrata de toda mi vida, soy y seré mientras yo viva, es el partido que yo quiero que gane… el triunfo de ella (de Clinton) está asegurado, créanme”, dijo don Carlos.
“El hispano que no vote con Clinton no tiene nombre, el hispano tiene que ser demócrata por obligación, porque los republicanos son el partido de los ricos. Nosotros los pobres no somos republicanos, somos demócratas”, añadió.
Cerca, un puertorriqueño que lleva 55 años viviendo en Filadelfia, dice que no sabe nada de política y que tampoco le interesa.
Pero tiene algo claro. Quiere que gane Hillary.
¿Por qué?, le preguntamos. “Porque ella no va a empezar una guerra. Él (Trump) sí. Y una guerra de racismo”, concluyó.
Maribel Hastings es asesora ejecutiva de America’s Voice y David Torres es asesor de medios en español de America’s Voice.