De acuerdo con los sondeos de opinión los estadounidenses respaldan propuestas concretas que forman parte del debate migratorio. Es justo que se ponga a votación algo, pero no debe dejarse pasar este momento, porque el 2014 es un año electoral y una vez más quedaría la reforma migratoria a expensas del voto. Es importante hacernos escuchar. Las marchas son una alternativa, entre muchas otras, para trasmitir un mensaje.