Frank Sharry: “Donald Trump no es un payaso a ser minimizado, es una amenaza a ser derrotada”
Hemos reconocido durante mucho tiempo los peligros de Donald Trump y su mezcla de nativismo, demagogia y autoritarismo.
Desde el lanzamiento de su campaña, Trump ha tratado de generalizar su visión de Estados Unidos tomada directamente del radicalismo del movimiento nacionalista blanco antiinmigrante, como esa idea de crear una Fuerza de Deportación para expulsar a todos los inmigrantes indocumentados y a millones de niños ciudadanos estadounidenses en los primeros dos años de su gobierno. Aunque hicimos notar nuestra confianza en que el movimiento por la reforma migratoria y nuestros aliados en todo Estados Unidos se asegurarían de que las ideas de Trump nunca entrasen en vigor, en agosto pasado imaginamos el tipo de vida que tendríamos si la nociva idea de una Fuerza de Deportación se convirtiera en realidad.
“Agentes de inmigración patrullando en los vecindarios latinos; un masivo incremento en la detención y deportación de inmigrantes indocumentados; niños ciudadanos estadounidenses sufriendo la revocación de su ciudadanía y sus pasaportes; familias llorando por ser separadas; trabajadores inmigrantes expulsados de sus trabajos y obligados a acrecentar el sector informal de mano de obra explotada; industrias enteras, desde la agricultura, la hotelería, el cuidado infantil y demás, enfrentando la amenaza de su desaparición; una fuerte recesión económica debido a las perturbaciones en el mercado de trabajo; una masiva ola de resistencia y conflictos en todo el país; aliados alrededor del mundo denunciando a Estados Unidos por abusos contra los derechos humanos…”
Ahora, Trump es el presunto nominado presidencial republicano y está peligrosamente cerca de la presidencia de Estados Unidos. Está a un paso de tener la oportunidad de poner en práctica su distorsionada visión del país.
A continuación compartimos la declaración de Frank Sharry, director ejecutivo de America’s Voice:
“Donald Trump no es un payaso a ser minimizado, es una amenaza a ser derrotada. Ha arrojado más leña al fuego radicalizado del nativismo moderno y nos pone a todos en el momento de la verdad.
Este es un momento de la verdad para los republicanos, ya sea que estén #conTrump o no. No hay espacio para la equivocación o la ambigüedad en este asunto, como país deberíamos estar antes que un partido. A menos que los republicanos sigan el ejemplo del senador Ben Sasse y repudien la visión de Trump y anuncien que no votarán por él, le están dando protección y apoyo a él y a su peligrosa visión.
Este es un momento de la verdad para votantes latinos, asiáticos e inmigrantes. Abarcando a los segmentos de más rápido crecimiento del electorado estadounidense, muchos han sido utilizados como chivos expiatorios y demonizados por la obscura visión que Trump tiene para Estados Unidos. Las elecciones de noviembre serán un referéndum sobre el fanatismo de Trump de ‘nosotros’ vs. ‘ustedes’ y nadie puede darse el lujo de cruzarse de brazos. La prioridad de registrarse, movilizarse y salir a votar debe coincidir con la urgencia de la amenaza que representa Trump.
Y este es un momento de la verdad para Estados Unidos. ¿Aspiramos a la visión de Trump de un agraviado y temeroso país anclado en políticas de identidad blanca, o aspiramos a una fuerte y positiva visión de Estados Unidos que aprecia su naturaleza multiétnica y lucha por igualdad y oportunidad para todos?
Tenemos seis meses para asegurarnos de que nuestro país y nuestros valores prevalezcan. Tenemos seis meses para probar que somos más fuertes que la amenaza que representa Trump. Tenemos seis meses para salir en defensa de un Estados Unidos que está evolucionando permanentemente para ser mejor”.