“El sistema de inmigración no solamente está roto, está hiriendo nuestro país”, aseguró Napolitano, quien también defendió la “identidad estadounidense” basada en ser un país de inmigrantes que lo enriquecen y ayudan a su progreso. “Tenemos que mantener un duro trabajo sobre el sistema migratorio, ayudar a mejorar la situación de aquellos que llevan aquí muchos años y pagan nuestros impuestos, facilitarles su camino hacia la ciudadanía”, insistió.