“Hemos concluido un acuerdo de principios. Creo que es una propuesta muy responsable, seria, bien pensada y aplicable”, agregó Diaz-Balart, a la salida de la reunión de más de dos horas del grupo bipartidista de ocho representantes que analiza la cuestión. De acuerdo a asistentes de los congresistas, uno de los principales elementos de disputa es si los inmigrantes que accederían a un estatus legal podrían participar de la ley de sanidad conocida como Obamacare que extiende la cobertura sanitaria, algo que aún no se ha solucionado.