Washington, DC – Ahí viene otra vez. El senador John Cornyn (R-TX) recurre una vez más a sus viejos trucos en el tema migratorio. POLITICO reporta que el senador Cornyn presentará una “enmienda radical a la propuesta de ley migratoria cuando pase a discusión la próxima semana, buscando reemplazar una sección completa dedicada a la seguridad fronteriza y alterar los capítulos de la seguridad nacional y justicia penal”. Washington Post tiene un resumen de la enmienda, la cual parece incluir severos detonantes que amenazan de entrada el camino a la ciudadanía para 11 millones de inmigrantes y restricciones sobre quién es elegible para esa vía.
Según Frank Sharry, director ejecutivo de America’s Voice, “este es el clásico Cornyn. Conocemos el modelo bastante bien. Él pretende ser sincero sobre la necesidad de la reforma. Pide cambios que están muy lejos de alcanzarse. Desestabiliza el acuerdo bipartidista ya logrado. Ayuda a boicotear la reforma. De cualquier manera vota no al final. Es por ello que le hemos otorgado el premio al “Mayor hipócrita en el tema migratorio“.
A pesar de la retórica y supuesta lógica del senador Cornyn, la seguridad interior y fronteriza ya se ha incrementado en la propuesta de ley migratoria del Senado a su nivel más alto en la historia de Estados Unidos. Tal como dice un editorial del Houston Chronicle, periódico del estado natal del senador Cornyn, “el hecho es que el gobierno federal ha establecido ampliamente puntos de referencia en seguridad fronteriza en tres propuestas de ley migratoria presentadas al Senado desde 2006… opositores implacables a la reforma moverán continuamente las medidas requeridas. Es una estrategia para sabotear un esfuerzo que goza de apoyo bipartidista en el Congreso y respaldo popular a lo largo del país”.
Sharry agregó: “Mientras se autodenomina como un reformador en el tema migratorio, el senador Cornyn siempre ha encontrado una razón para “dar un no” a la reforma. Durante la época de la legislación migratoria de McCain-Kennedy, el senador Cornyn hizo bellos discursos sobre la necesidad de la reforma. Entonces trabajó con Jon Kyl (ex senador republicano de Arizona) para hacer una propuesta encaminada a minar el apoyo a McCain-Kennedy. Cuando la propuesta pasó a debate al Senado en 2006, él propuso enmiendas para envenenarla, y entonces, a pesar del hecho de que otros 23 republicanos votaron por ella, él lo hizo en contra. En 2007, tras ganar aprobación para una enmienda letal que debilitó el apoyo a la propuesta y empezó a morir el esfuerzo, otra vez él votó no. Para colmo de males, sólo momentos después de que ayudó a derrotar la reforma, el senador Cornyn dio un discurso en el Senado acerca de la necesidad de aprobar la reforma migratoria. En 2010 votó contra el DREAM Act, bloqueando la propuesta de 60 votos que se necesitaban para poner fin a la táctica dilatoria republicana y frustrando los SUEÑOS de millones de jóvenes. ¿Se supone que creamos que ahora él votará por el sí? No lo creeremos ni por un momento.
“La conclusión es que la propuesta que actualmente está en el Senado ha llegado a su punto óptimo: combina un alcanzable camino a la ciudadanía que los demócratas necesitan, con el mayor incremento en seguridad migratoria en la historia de Estados Unidos, y que los republicanos dicen que requieren. Revolver ese equilibrio amenaza la totalidad del proyecto. Cornyn lo sabe. Sus colegas también deberían saberlo”, concluyó Sharry.
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