Washington, DC – La Suprema Corte emitió un fallo hoy sobre los Protocolos de Protección Migratoria (MPP, por su sigla en inglés), también conocido como “Quédate en México”. Tras una decisión de 5-4, la Corte decidió que el intento del gobierno de Biden de poner fin a esa política era legal. Este desastroso programa puede terminar y quizá, lo que es más importante, se anula la opinión equivocada del juez de la corte menor, que iba en el sentido de que la expulsión o el encarcelamiento de quienes buscan asilo es obligatoria según la ley migratoria de Estados Unidos.
A continuación compartimos un comunicado de Douglas Rivlin, Director de Comunicación de America’s Voice:
“Nos complace el fallo de hoy, con el que la Corte sostiene que la decisión del gobierno de Biden de terminar con el programa Protocolos de Protección Migratoria, también conocido como Quédate en México, no violó la ley federal. La Corte falló certeramente que el juez de la corte menor, quien aseguró que el encarcelamiento de quienes buscan asilo o su expulsión eran las únicas dos opciones de las autoridades federales, estaba equivocado.
Sin embargo, la existencia misma del programa Quédate en México es un síntoma del persistente fracaso de nuestra nación de reconocer que las políticas de migración y de asilo no deberían empezar o terminar en nuestra frontera sur.
Como nos recuerda con terrible detalle la tragedia ocurrida esta semana en San Antonio, que dejó más de 50 muertos, necesitamos diseñar un sistema migratorio y una estrategia regional más amplia para asegurar que la gente no tenga que atravesar México para acceder por vías legales a Estados Unidos o apoyarse en traficantes de personas para lograr una mejor vida. Mediante nuevas visas, inversiones en comunidades de las que los migrantes y los refugiados provienen, alianzas internacionales continuas y un enfoque ordenado sobre el manejo y el procesamiento fronterizos, podemos transformar la crueldad y el caos que caracterizan a Quédate en México y otras fallidas políticas disuasorias en una estrategia ordenada e inteligente.
La política pública Quédate en México tiene un demostrable conteo de personas que murieron mientras eran empujadas fuera de Estados Unidos. Al igual que el Título 42, que aún está vigente, la política pública de Trump de cerrar los puertos de entrada a los solicitantes de asilo obliga a las personas a hacer un peligroso intento de ingresar entre los puertos de entrada y expulsa de manera expedita a la mayoría de los que buscan asilo, sin una audiencia adecuada, Quédate en México no es una política pública reparable. Al igual que Quédate en México, estas otras políticas que impiden que Estados Unidos tenga un sistema migratorio seguro, legal y ordenado, promulgadas mayormente durante la presidencia de Trump, deben terminar.
La forma de abordar esta gran cifra de personas que buscan seguridad en nuestras fronteras no es levantando nuevas y más elaboradas formas para evitar que soliciten asilo a través del sistema legal estadounidense o desperdiciar miles de millones de dólares en un muro fronterizo. El remedio consiste de un proceso de visas ordenado, tribunales, inversiones en los países de los cuales las personas se ven obligadas a huir para regular la migración de manera inteligente y no continuar con esfuerzos fallidos para reprimir la migración y restringir derechos de forma poco efectiva. El reciente anuncio de La Declaración de Los Ángeles es un buen comienzo, y el fallo de hoy, aunque bueno, es un recordatorio de por qué es tan importante convertir esa visión en una realidad factible”.