No es un secreto que Donald Trump ha construido su imperio sobre las espaldas de los inmigrantes, tanto documentados como indocumentados.
Hace más de tres décadas hubo un grupo grande de trabajadores indocumentados —“llamado la “Brigada Polaca” debido a su país de origen” — que demolió el edificio que se convertiría en el sitio de la joya de la corona de Trump y en símbolo de su riqueza, la Torre Trump en Manhattan.
Otra Torre Trump se está erigiendo en Vancouver, Canadá — y es otra vez gracias al trabajo de inmigrantes como Diego Reyna.
Es por ello que Diego, quien es México-Canadiense, colocó una bandera mexicana hasta arriba de la Torre Trump: “Puse una bandera mexicana hasta arriba de la Torre Trump en Vancouver sólo para mostrar que él se está beneficiando de nosotros y que estamos trabajando duramente en sus proyectos y que no todos somos delincuentes”.
“Usted está en contra de un grupo étnico del que se está beneficiando”, añadió. “Este edificio está de pie aquí ahora gracias a nosotros —a nuestro trabajo, a nuestro esfuerzo. De tal modo que dejamos aquí un pequeño regalo para el Sr. Trump para que, cada vez que nos juzgue, pueda pensar: ‘¿Quién está construyendo tus torres?’ Nosotros. Gracias”.
Aunque después fue retirada, la imagen de Diego parado enfrente de la bandera ha sido ampliamente compartida en redes sociales. Y en Canadá, Diego no está solo en el sentimiento anti-Trump: una encuesta reciente encontró que la mayoría de los canadienses piensa que los constructores ya no deberían usar el nombre de Trump en sus edificios.
Trump ya ha sido prohibido simbólicamente en México. Sus porcentajes electorales en las encuestas son desastrosos, en comparación tanto con Hillary Clinton como con Bernie Sanders, y ahora parece que los canadienses tampoco lo quieren mucho. Trump quiere presumir que tiene amigos en todas partes como hombre de negocios, ¿pero qué significa el hecho de que toda Norteamérica no te soporte?
¡Qué pena!