01/11/09 a 5:36pm por Maribel Hastings
Ayer hubo elecciones en varios lugares, pero hay dos contiendas por gubernaturas que llevaron al presidente Barack Obama a hacer campaña en New Jersey y Virginia.
Son elecciones estatales que se producen casi a un año exacto de que Obama ganara la Casa Blanca en la histórica elección presidencial del 2008, y para muchos observadores los resultados pueden reflejar, hasta cierto punto, un juicio sobre la administración Obama, o sobre los dos partidos, Demócrata y Republicano.
Según el senador demócrata de New Jersey, Bob Menéndez, “los ojos de la nación están sobre nosotros” y “esta elección formulará una declaración sobre Obama”, según reportó Northjersey.com. Después de todo, es un preámbulo a los comicios de medio tiempo del 2010.
El gobernador demócrata de New Jersey, Jon Corzine, busca la reelección, y el demócrata Creigh Deeds, aspira a la gubernatura de Virginia.
Las dos contiendas parecen complicadas para los demócratas. Las encuestas apuntaban a una contienda cerrada entre Corzine contra el republicano Chris Christie. Pero la desventaja de Deeds sobre su opositor republicano, Bob McDonnell, era de dobles dígitos.
Será interesante ver cómo le va a estos dos demócratas a un año de las elecciones de 2008 –y cómo les va con los votantes latinos-, aunque es una elección estatal temprana y hay muchos factores que pueden incidir, incluyendo las tendencias locales y la escasa participación electoral. No se espera una masiva participación de los llamados “demócratas de Obama” como en el 2008.
Con todo, quiero saber si pueden establecerse contrastes entre una campaña demócrata, la de Corzine, que ha buscado activamente el voto latino –aunque no todos lo apoyen-, y otra campaña demócrata, la de Deeds, cuyos esfuerzos digamos que han sido pírricos. O qué sugerirán los resultados para ambos partidos rumbo al año entrante.
Obama hizo campaña por los dos, pero en New Jersey, apareció en mensajes bilingües en radio y televisión y envió a figuras demócratas hispanas de su administración como la Secretaria del Trabajo, Hilda Solís, para apelar al voto de las latinas porque son, según Solís, “una fuerza increíble”…“Mi jefe (Obama) sabe que ésta es una de las elecciones más importantes en todo el país”, declaró Solís.
El tema migratorio, sin ser central en estas contiendas en términos generales –aunque puede ser determinante en la forma en que voten algunas personas-, siempre hace su aparición y los dos demócratas en New Jersey y Virginia apoyan la reforma migratoria, aunque en el caso de Deeds en Virginia, su campaña apenas si ha mencionado el tema y algunos aspectos de su historial en este rubro son cuestionables para muchos.
Corzine creó una comisión especial que formuló recomendaciones en el rubro migratorio y algunos grupos latinos del estado lo han aplaudido aunque otros han cuestionado que no hayan podido implementarse muchas de las recomendaciones.
El tema del programa 287(g), que permite a policías locales actuar como agentes de inmigración, también es de interés para muchos votantes latinos.
En New Jersey, una organización hispana dio su apoyo a Corzine sobre Christie, entre otras cosas, porque el republicano eligió como su compañera de fórmula a Kim Guadagno, Alguacil del Condado de Monmouth, uno de los dos departamentos de policía en New Jersey que firmaron el revisado acuerdo 287(g) con el Departamento de Seguridad Nacional (DHS).
Aunque Christie ha criticado el programa y dice que Guadagno lo aplicará en las cárceles, la selección de Guadagno hizo que un líder latino de New Jersey, Frank Argote- Freyre, de la la Alianza de Liderazgo Latino de New Jersey, lo catalogara de “charlatán político” que “hizo su carrera a expensas de los inmigrantes”.
Pero Christie, quien fue fiscal federal, llegó a decir el año pasado que “estar en este país sin la documentación apropiada no es un crimen” y “no dejen que le hagan creer que es un crimen con el cual la fiscalía federal tiene que lidiar porque no lo es”.
“Si hay gente cometiendo crímenes, hay que lidiar con ellos, pero si hay indocumentados por ahí, la Oficina de Inmigración y Controles Aduanales (ICE) tiene que hacer su trabajo”, dijo entonces Christie.
En Virginia varios condados aplican el 287(g) y el aspirante republicano, McDonnell, apoya el programa y su ampli ación en el estado.
Deeds dice que apoya esfuerzos para identificar y deportar a indocumentados que estén en las cárceles y aunque es un tema que preocupa a muchos votantes latinos de su estado, digamos que el demócrata lo ha abordado con tibieza.
Obama ganó en estos dos estados en 2008. En sus casi diez meses en la presidencia su agenda se ha complicado por la crisis económica que parece estar dando leves señales de mejoría, por dos guerras en el exterior, y una en el Congreso por la reforma de salud.
Algunas de sus promesas –como la reforma migratoria- se han retrasado y para algunos sectores la paciencia se ha tornado en disgusto.
Esta semana se sabrá si en efecto todo este panorama incide sobre las elecciones de New Jersey y Virginia, y si los votantes latinos envían o no un mensaje a los políticos de ambos partidos, sobre todo a los que controlan el poder, de cara a la primera prueba de fuego en los comicios del 2010.