- Se mantiene el compás de espera en las negociaciones entre republicanos, demócratas y la Casa Blanca sobre preocupantes cambios en materia migratoria dentro del paquete de ayuda a Ucrania, Israel y Taiwán
- El Caucus Hispano del Congreso y activistas pro inmigrantes intensifican la presión sobre la Casa Blanca para que no ceda al chantaje republicano a expensas de inmigrantes y refugiados
►Las negociaciones entre republicanos, demócratas y la Casa Blanca en torno a las medidas migratorias que se incluirían en el mismo paquete de asistencia a Ucrania, Israel y Taiwán continuaron esta semana y parece inminente que haya nefastos cambios a las leyes de asilo, así como una lista de medidas de detención y deportación de indocumentados que reviven políticas impulsadas por Donald Trump.
►Entre esas medidas figuran elevar el requisito de miedo creíble para solicitantes de asilo; alguna forma de Título 42; detenciones sumarias y expulsiones aceleradas, entre otras. NBC News vía Telemundo reportó que el propio Departamento se Seguridad Nacional reconoce que es imposible detener a todo el que cruce sin documentos, porque hacerlo podría “romper la frontera”, debido a la gran cantidad de inmigrantes que serían detenidos indefinidamente porque sus países no los aceptan de regreso.
►Vanessa Cárdenas, Directora Ejecutiva de America’s Voice, declaró que “ceder a las demandas de los republicanos y adoptar las políticas de Trump-Miller es una medida extrema e innecesaria, además de negligente a nivel político y de política pública. Avanzar estas propuestas draconianas no dará a la administración Biden ningún crédito de parte del Partido Republicano y es posible que ni siquiera obtenga la ayuda que el presidente tan desesperadamente quiere y que Ucrania necesita de manera urgente”. En todo caso, agregó, perjudicará a Biden entre los votantes que requiere para reelegirse en 2024.
►Por otra parte, los reportes también han generado rechazo entre algunos demócratas y activistas pro inmigrantes. El Caucus Hispano del Congreso, el caucus Progresista y activistas pro inmigrantes, refugiados y de derechos civiles y humanos se congregaron el miércoles en el Capitolio federal para urgir a Biden que rechace el lenguaje migratorio en discusión porque asestará un duro golpe a las leyes de asilo; empeorará la presión en la frontera, y porque revive políticas de Trump que el propio presidente Biden rechazó en su momento.
La Semana en Inmigración es un servicio de America’s Voice en Español