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El rostro humano de la migración

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Las altas temperaturas que se registran por estos días en la franja fronteriza EEUU-México se han venido a agregar como uno más de los problemas que agudizan la situación de los migrantes que aún tienen la esperanza de solicitar asilo. Por si fuera poco, se enfrentan también al fenómeno de la extorsión por parte de oficiales en territorio mexicano, lo que reduce aún más sus posibilidades de avanzar. Mientras tanto, ya en suelo estadounidense familias migrantes padecen el rechazo desde el poder político, como ocurre ahora mismo en Florida, aun antes de que entre en vigor la ley más antiinmigrante que existe en el país.

►“‘La calor’ (es) insoportable, a veces nos tenemos que meter en el río para aunque sea refrescar nuestros cuerpos, porque ‘la calor’ es demasiado brava”. (1)

►”Tenemos que comprar comida a diario porque con ‘esta calor’ no podemos guardar nada porque se nos daña. Entonces a diario tenemos que ir a comprar la comida, el alimento de la bebé; igual que el agua, se nos calienta demasiado y tenemos que ir a cada rato a comprar agua”. (2)

Arturo Ceballos (1) y Greysi Lares (2), migrantes venezolanos explicando a Univision la forma como tienen que lidiar con las altas temperaturas en Matamoros, Tamaulipas, que superan los 110 grados Fahrenheit.

►”Si más padres centroamericanos supieran la verdad de lo que vivirían sus hijos, muchos se lo pensarían antes de que languidecieran en manos de criminales violentos”.

Anne Basham, fundadora del Grupo de Trabajo sobre la Trata de Personas, alertando a padres de familia sobre el peligro de que sus hijos migrantes caigan en las garras de la explotación sexual, según nota de Univision.

►“Ya habíamos pasado todo el papeleo, ya teníamos… el hotel, cuántos días nos íbamos a quedar y el día de regreso. Y en el aeropuerto, uno de esos vigilantes, bueno uno de esos policía… y no pidieron dinero. Dijeron que si no les dábamos dinero… aproximadamente 80 dólares por persona, no devolvían y que al dueño del carro le podían quitar el taxi. Por favor, se lo agradcemos, hagan justicia”.

Migrante colombiano en declaraciones a un medio mexicano sobre la extorsión sufrida en México a manos de oficiales, publicadas por La Opinión.

►“Estamos preocupados y no estamos seguros de si en el futuro tendremos trabajo. No estamos haciendo nada malo… Con la nueva ley, siempre estoy pensando en los papeles. No va a ser lo mismo: no vamos a ser libres”.

Sara Pérez, migrante guatemalteca, relata a El Nuevo Herald el temor que sienten los indocumentados y sus familias que viven en Florida antes de que entre en vigor la nueva ley firmada por el gobernador Ron DeSantis.