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La acción diferida y el “problema” de imagen

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02/05/11 a 11:20am por Maribel Hastings

WASHINGTON – Para Mariano Cardoso la tierra dejó de temblar, por ahora.

Por casi tres años batalló para que el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) suspendiera su deportación.

Fue necesaria una intensa campaña del joven, de otros Soñadores, de grupos de presión y la intervención del gobernador de Connecticut, el demócrata Dannel Malloy, y del senador federal Joe Lieberman, entre otros, para que el DHS hiciera lo que debió hacer desde un principio: suspender la deportación del estudiante de 23 años de edad, traído por sus padres desde México cuando no tenía ni dos años de edad.

Tras la intervención del gobernador, el joven estudiante de Matemáticas que aspira a ser ingeniero, me dijo que “parece que ahora existe la forma de que el trozo de tierra sobre el cual estoy parado deje de temblar”.

Días después el DHS le concedió acción diferida, es decir, la suspensión temporal de su deportación.

Esa acción diferida, que no requiere de la intervención del Congreso, es la que el presidente Barack Obama puede aplicar a todos los jóvenes que llenen los requisitos del DREAM Act y que como Mariano, enfrentaron, enfrentan o enfrentarán la deportación.

Pero esta Administración no sólo ha roto el récord de deportaciones sino que ha concedido menos acciones diferidas que el gobierno del republicano George W. Bush.

La Opinión reportó que el DHS concedió 542 acciones diferidas en el 2010 aunque no se especifica cuántas fueron concedidas a Soñadores.

El diario cita además las estadísticas de acciones diferidas desde 2005, cuando Bush era presidente, hasta 2010: 891 casos en 2005; 640 en 2006; 604 en 2007; 1,029 en 2008 y 780 en 2009.

Entre los años fiscales 2009 y 2010 más de 800,000 personas fueron deportadas.

La administración Bush promedió 771 acciones diferidas y 301,418 deportaciones entre los años 2005 al 2008, mientras que la administración Obama promedió 661 acciones diferidas y 391,348 deportaciones en sus primeros dos años de gestión. Menos acciones diferidas y más deportaciones.

Pero en lo que respecta a conceder la acción diferida a todos los Soñadores, la Casa Blanca se mantiene firme en que seguirá considerando los casos de manera individual porque las acciones administrativas no son viables a gran escala.

Son viables, pero políticamente incómodas. El presidente no puede crear un nuevo estatus migratorio para estos jóvenes, pero sí puede ampararlos de la deportación, como grupo, en tanto haya una resolución legislativa.

Lo que sí es viable son las reuniones y confirmando lo que dije la semana pasada, sí se pudo hacer otra reunión en la Casa Blanca para hablar de reforma migratoria con celebridades y comunicadores hispanos. Y las que faltan.

Soplan vientos electorales y el presidente Obama quiere comunicarle a los votantes latinos que vuelvan a apoyarlo en el 2012 aunque haya deportado a media humanidad.

Interesantemente, algunos de los participantes dijeron a la prensa que una de las ideas planteadas en el encuentro es que hay que lograr que la comunidad hispana tenga una mejor imagen para ganar más adeptos a la reforma.

O sea, ¿que la falta de una reforma migratoria se debe a un problema de imagen de la comunidad hispana? Que yo sepa, quien tiene un problema de imagen entre un sector de la comunidad latina es el presidente por sus políticas migratorias.

Para mejorar esa imagen del presidente probablemente se renueven los esfuerzos de tratar de impulsar el DREAM Act en el Congreso, algo poco viable en una Cámara Baja de mayoría republicana. O se intente mejorar el proceso de adjudicación de esas acciones diferidas caso por caso para que sea más uniforme y expedito y no se torne literalmente en un vía crucis para estos jóvenes.

Esto sería bienvenido pero no le quita méritos a la petición de que se ampare de la deportación a TODOS los jóvenes elegibles al DREAM Act.

Porque mientras no ocurra, miles de Marianos, jóvenes productivos y talentosos que no tienen un problema de imagen, siguen en un limbo migratorio y el suelo que pisan puede temblar en cualquier momento.

Maribel Hastings es asesora ejecutiva y analista de America’s Voice

Lea otra columna de Maribel Hastings sobre las opciones administrativas que tiene el presidente Obama para proveer alivio migratorio a ciertos grupos.

A falta de acción legislativa, opciones administrativas
http://noticias.univision.com/inmigracion/noticias/article/2011-04-18/a-falta-de-una-reforma

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